Pasan los años, pasan las temporadas, y no nos cansamos de él. Capta la luz, atrae todas las miradas y aporta un inevitable aura de dulzura, a imagen y semejanza del rosa (que este año vuelve a endulzar cualquier look). Aunque se combina de maravilla con otros colores como el azul y por supuesto el negro (el look bicolor clásico es un acierto en cualquier temporada por el contraste creado), toca probar este verano con un poco más de atrevimiento luciendo el total look blanco.
¿Cómo se logra de forma concreta? Conjuntando prendas blancas de diferentes tonos. El blanco impoluto puede ser el de base, pero lúcelo con prendas de color marfil o crema que crearán un mejor efecto óptico. Apuesta por tejidos fáciles y cómodos, que podrás fácilmente lavar como el algodón, ya que no es ninguna novedad, el blanco tiende a ensuciarse más que cualquier otro color. Los conjuntos blancos que siempre funcionan son los del vestido corto o midi con zapatillas.
¿Cómo se logra de forma concreta? Conjuntando prendas blancas de diferentes tonos. El blanco impoluto puede ser el de base, pero lúcelo con prendas de color marfil o crema que crearán un mejor efecto óptico. Apuesta por tejidos fáciles y cómodos, que podrás fácilmente lavar como el algodón, ya que no es ninguna novedad, el blanco tiende a ensuciarse más que cualquier otro color. Los conjuntos blancos que siempre funcionan son los del vestido corto o midi con zapatillas.

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